Sabéis que me encanta el cine y no puedo pasar muchos días
sin ver una película. Lo malo es que en verano con la ropa
tan ligera y el aire acondicionado tan fuerte en la salas, es
mejor ver cine en casa o mejor aún al aire libre. Los días
en Formentera han sido perfectos, porque además de toda
la magia y belleza de la isla, cuentan con un ciclo de cine
al aire libre. He podido disfrutar de algunas de mis películas
favoritas a la luz de la luna y en muy buena compañía.
Nunca olvidaré la noche que fui con Elvis Goodman a
ver mi film favorito del director sueco obsesionado con
los silencios: “Fanny y Alexander”. La versión de “Alicia”
de Burton es más bella bajo la luz de las estrellas. Hemos
visto también “Sed de mal” de Orson Welles y “Pierrot el
loco” de Godard. Pero todavía quedan piezas que prometen:
“El arte de ser Arrabal” para el 30 de agosto o “Gainsbourg
(vida de un héroe)” entre otras. Pero también el clásico
moderno “Gato negro, gato blanco” del polifacético
director servio Emir Kusturica. “Tamara Drewe” de
Stephen Frears o la inolvidable “Bienvenido Mister
Marshal” del mejor director de cine español hasta la
fecha Luis García Berlanga.
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